El Profeta

“Pablo Gargallo está presente con el «Profeta» una de las piezas más importantes de la escultura al plantear el problema de la incorporación del espacio y de la reforma figurativa.”

Westerdahl, E. (1973). La 1ª Exposición Internacional de Escultura en la calle, en Santa Cruz de Tenerife. Quaderns d’arquitectura i urbanisme, ISSN 1133-8857, Nº. 99. Número dedicado a los parques naturales, 47-50.

“Y es en ese instante cuando reaparece la milagrosa varita mágica de Pablo Serrano, que consiguió que su amigo el escultor Mark Macken -vinculado al Museo Middelheim de Amberes- enviase de forma urgente, desde Bélgica, un ejemplar de El profeta, de Gargallo, y así pudiésemos disfrutar durante unos meses, en el Parque García Sanabria, de esa joya indiscutible de la escultura contemporánea.”

Saavedra Martínez, V. (1996). Historia de un acontecimiento. En A. Carnero, D. Duque, & C. Schwartz, Iª Exposición Internacional de Escultura en La Calle (págs. 11-24). Santa Cruz de Tenerife: Cabildo Insular de Tenerife. Área de Cultura. ISBN: 84-87340-63-6

Fue un apoyo impagable el proporcionado por el Museo Middelheim de Amberes, que cedió para la Exposición tinerfeña la réplica que posee de El profeta, de Pablo Gargallo, en bronce, sobre el original en barro dejado por el artista aragonés a su muerte.

Hernández Perera, J. (1996). Dos décadas de Esculturas en la Calle. En A. Carnero, D. Duque, & C. Schwartz, Iª Exposición Internacional de Escultura en La Calle (págs. 25-54). Santa Cruz de Tenerife: Cabildo Insular de Tenerife. Área de Cultura. ISBN: 84-87340-63-6

Los de mayor antigüedad eran Julio González (n. 1876) y Pablo Gargallo (n. 1881), crecidos ambos en el riquísimo caldo de cultivo de la Cataluña modernista primero y noucentista luego.(…) del aragonés se ofrecía su obra emblemática El profeta (1933), en la que mejor se manifiesta su opción expresiva y lineal que, como sabemos, alternaba con su otra perspectiva, volumétrica y popular. No podíamos empezar de mejor manera, si bien se echaba en falta alguna pieza de Picasso de los 30 para que la tríada quedara completa.

Pérez Reyes, C. (1996). Reflexión sobre lo visto y lo vivido. En A. Carnero, D. Duque, & C. Schwartz, Iª Exposición Internacional de Escultura en La Calle (págs. 65-76). Santa Cruz de Tenerife: Cabildo Insular de Tenerife. Área de Cultura. ISBN: 84-87340-63-6

“De Amberes y procedentes del Museo Middelheim por mediación de su director Mark Macken, llegaron tres obras representativas de distintos afanes renovadores de la figuración: El Profeta (1933, bronce), la gran pieza de P. Gargallo, la que nunca pudo ver fundida en bronce por escasez de dinero, una figura estremecedora, descarnada, ahuecada y un buen ejemplo de ese proceso de desmasificación a que fue sometido el modelo escultórico heredado”

Fernández Lomana, M.A. (1996). De la conmemoración al homenaje. En A. Carnero, D. Duque, & C. Schwartz, Iª Exposición Internacional de Escultura en La Calle (págs. 87-108). Santa Cruz de Tenerife: Cabildo Insular de Tenerife. Área de Cultura. ISBN: 84-87340-63-6